Buenos días, tardes y noches a todos nuestros lectores. Si estás en esta página es por una muy simple razón: eres un miembro activo de una iglesia y te gustaría saber más acerca de cómo puedes estar más envuelto en las actividades de esta.

Por suerte para ti, los caminos del señor siempre son muchos, por lo que nunca encontrarás una puerta cerrada aquí. ¿Deseas pruebas? ¡La música! Para muchos un instrumento de perturbación, en la iglesia se convierte en una experiencia completamente nueva.

En este artículo vamos a estar repasando el papel de la música en la iglesia, así sabrás apreciar mejor cada vez que entres en una de estas para escuchar cantar a los miembros y sentir la melodía de los instrumentos en armonía.

Coro de la Iglesia

Y es precisamente eso lo que logra la música en la iglesia: la armonía. De hecho, si es una buena pieza, esto se puede lograr en todos los campos, como el ejemplo perfecto del himno de la Champions League.

El coro acepta toda clase de personas

La mayoría de las iglesias en Chile cuentan con coros conformados por personas de la comunidad, aquellas que atienden a misa todos los domingos y que son miembros activos de su parroquia.

¿Lo mejor de todo? Cualquier persona puede participar en el coro de una iglesia siempre y cuando sea miembro de esta y, obviamente, sea creyente o este buscando los caminos marcados por nuestro señor.

En algunas de las iglesias, de hecho, encontrarás que tienen varios coros, uno para los más pequeños y otro para los adultos, lo que hace que la integración de la familia sea mucho más sencilla.

Por si fuera poco, los coros suelen visitar otras iglesias por un poco de “competición” amistosa que no hace más que estrechar los lazos entre las personas y ayudar a mejorar la música que se crea.

La unión de la iglesia es muy importante

Uno de los desafíos más grandes que están sufriendo las iglesias en todo el mundo es la falta de unión entre sus integrantes; no olvidemos que, al final, la idea es que todas formen una sola familia cuyo padre no es otro que Jesús.

Y la música ha demostrado ser un instrumento a través del cual las personas encuentran algo que las une de una forma que, en ocasiones, no se puede explicar más allá de una intervención divina.

Si quieres ver si una iglesia es unida o no, entonces te recomendamos ir en los días en donde se presenta el coro, ya que allí se puede ver a todo el mundo cantando, abrazando y, en general, disfrutando de la compañía del otro.

Y es que no hay mayor concentración que aquella que produce la música.

La atracción es mucho más poderosa

Una Iglesia feliz siempre será más atractiva que una en donde solo se vaya a rezar, por lo que la música también sirve para atraer a más personas, las cuales terminan cambiando su vida por obra y gracia del señor.

Hemos escuchado de muchos casos de personas que se han acercado a las iglesias para escuchar un poco de música y, poco a poco, han ido sumándose a la comunidad hasta convertirse en los miembros más activos de todos.

La música, en conclusión, fue un regalo de Dios hacia nosotros, por lo que hacemos muy mal en muchas veces catalogarla como un pecado solo porque la más popular no impulsa nuestros valores.

Pero, cuando se usa correctamente, el poder que tiene para atraer a nuevos miembros es muy fuerte, así que no esperes más y únete al coro local.